Uno de los DLCs más esperados del videojuego Final Fantasy XV ya está con nosotros, habiéndome dejado un muy buen sabor de boca, y exprimiendo uno de mis aspectos favoritos del mismo: los combates. Es muy recomendable haber completado el juego principal o haber llegado hasta el penúltimo capítulo antes de leer el siguiente párrafo, pues contiene detalles de la historia. Lo bueno es que podemos jugar tanto solos como online, por lo que el Gold o Plus no es necesario para poder pasarnos el DLC. Vamos a darle un repaso al asunto, con sus aciertos y también sus menos.
El contexto del DLC no podría ser mejor en relación a la historia del título, pues nos sitúa en ese momento intermedio entre los capítulos 13 y 14, donde sabemos que se produce un enorme vacío argumental del cual debíamos deducir los hechos prácticamente. El declive de Eos es un escenario propicio para ambientar una gran guerra cotidiana por la supervivencia humana. La noche eterna se cierne sobre el continente de Lucis y los pocos supervivientes se congregan en torno a Lestallum, el bastión de la resistencia. Desde aquí se envía electricidad por medio de la linea eléctrica al resto de campamentos y ciudades; todo gracias a las esquirlas de Meteo y a la central eléctrica Exineris, la última esperanza para generar luz. Con el Entronado en paradero desconocido, los Glaives, la Comitiva Real y los Cazadores de Meldacio se unen para defenderse de los cadentes, que cada vez son más numerosos y peligrosos.
Con esa interesante premisa arranca el juego, acompañados de un viejo conocido, Libertus ─uno de los personajes de Kingsglaive─ que como vemos ha sobrevivido. Encarnaremos a un Glaive sin identidad y sin memoria que adoptará las características físicas y nombre que deseemos mediante un editor. Ya en la ciudad comenzaremos a entender el sistema de avance, uno de los más adictivos que se hayan programado en torno a FFXV. Matando enemigos y haciendo cacerías obtendremos esquirlas de Meteo con un número de kilovatios además de guiles, las cuales utilizaremos para reabastecer los distintos puestos y tiendas de la ciudad, para así empezar a expandirnos hacia fuera siguiendo los tendidos eléctricos que consideremos ─ramificaciones que van pidiéndonos cada vez más esquirlas─. De este modo abriremos caminos, rescataremos personajes y refugiados que se unen a la ciudad y nos darán nuevas misiones, es decir, más cacerías.
Al contrario que el juego principal, ya no existe la exploración; todo queda limitado a puntos de teletransporte y zonas específicas para combatir, por lo que Lucis parecerá más pequeña de lo que es. Esto no es del todo malo, puesto que estamos en un mundo mucho más hostil y moverse por carreteras es muy peligroso ─recordemos que estamos en una Eos desbordada y a punto de colapsar─, de modo que se ha pensado en esa necesidad de dar pasos inteligentes en lugar de recorrer todo en chocobo a modo de vacaciones como antes. Al ser Lestallum la base de operaciones, el resto de ciudades que podremos liberar contienen menos npcs y alguna que otra tienda, por lo que casi todo el juego se desarrolla en la mencionada ciudad. A ésta acudirán de vez en cuando queridos personajes, y podremos ver qué fue de los secundarios que echábamos de menos en la trama principal. Igualmente útil resulta consultar crónicas, con bastante información del entorno y personajes; así que si os gustó la trama de Noctis y sus amigos aquí podréis expandir vuestro conocimiento de FFXV.
Las novedades que hacen de Hermanos de Armas el mejor DLC hasta la fecha son dos: El sistema de mejora de armas y el combate en sí mismo. En cuanto al sistema, se ha optado por fortalecer a nuestro personaje equipando cuatro armas; cada una de ellas sumará estadísticas al total, por lo que la fuerza no está ya tanto en el nivel ─que sigue importando─, sino en una buena equipación. Las armas pueden subir de nivel usando objetos en el puesto de Cid, pudiendo algunas de ellas evolucionar en otro arma más poderosa, aumentando su nivel máximo. Cada objeto que usemos en esta forja otorgará una experiencia determinada al arma y unas estadísticas o daño elemental, así que conviene examinar cuáles vamos a usar con mucho cuidado. De hecho, no cualquier objeto vale para evolucionar un arma, ni tampoco cualquier estadística; cada una tiene sus especialidades. Se ha puesto muchísimo énfasis en esta cuestión, importando verdaderamente las estadísticas y sirviendo realmente en batalla. Además, algunas armas pueden tener hasta dos habilidades activas o pasivas asociadas a la misma, pudiendo ser magias elementales, bonificaciones o incluso propiciar estados alterados con cierta probabilidad. La alquimia es un rasgo muy significativo y bien estudiado en este DLC, recordándonos a viejos Final Fantasy y sus intrincadas combinaciones para fortalecer a un personaje; algo que casi parecía olvidado en esta entrega.
La segunda novedad, como decía, es la batalla. La eliminación de objetos de curación es el mayor acierto posible. Es hora de olvidarse de esa "inmortalidad" que Noctis tenía, aquí vamos a morir y mucho. Se ha añadido un comando para curar, otro para hacer una ofensiva mágica y un escudo defensivo de área, pudiendo también curar a nuestros compañeros usando Lux Impetus sobre ellos para sacarlos de la Agonía. El compañerismo es vital, esencial en Hermanos de Armas. Un equipo de 4 personas sólo funciona si hay voluntad de ayudar, ya que al tener funciones online las batallas pueden acabar mal si somos egoístas. La CPU aparece si alguno de los miembros se ha caído, o simplemente si elegimos jugar solos (recordemos que el juego se puede disfrutar también en solitario), con una IA más que correcta, aunque son más débiles por defecto que un jugador humano.
Se nota la dificultad añadida, estando especialmente diseñado el DLC para aquellos a los que les supiesen a poco las batallas del juego principal. Aquí hay que dominar a la perfección el Lux Impetus, los contraataques y todo lo demás. Hay algunos momentos peliagudos y al comienzo nos vamos a pasar besando la lona gran parte del tiempo. La recuperación al fin y al cabo depende de los demás, por lo que es necesario hacer lo propio con los compañeros indefensos. Una buena coordinación cambia totalmente el resultado de las peleas, garantizado. Con los ingredientes de cocina recogidos entre todos se nos preparará un plato específico, que otorgará estadísticas válidas para la siguiente misión. El uso de Sigilos (el equivalente a las armas legendarias de Noctis) aumentará nuestras estadísticas y nos darán algunos ataques interesantes. Sobre esta cuestión, aún faltan Sigilos que no están implementados, llegando mediante futuras actualizaciones.
Respecto a la conectividad online hay serios problemas en esta versión 1.0. Desde misiones donde nunca respawnean los enemigos (teniendo que reiniciar el juego), a bugs con las cargas, niveles de protección de objetivos donde éstos mueren solos (???), momentos incómodos debido a las tediosas pantallas de carga, así como problemas para poder jugar con amigos ─el tiempo que dura una sala abierta es irrisorio, así que o están todos atentos para entrar al instante o habrá que abortar la misión─. Faltan opciones de inmediatez, hay que mejorar la interfaz de búsqueda y hay que dar opciones para cancelar si nos hemos equivocado eligiendo misión, puesto que es un auténtico coñazo regresar a Lestallum cada vez ─haya tenido o no éxito la misión─. Desgraciadamente jugar a Hermanos de Armas equivale a pasarse un tercio de tu tiempo en pantallas de carga, en interfaces y en salas de espera. Es tedioso. Es muy divertido, pero altamente cargante, mina la moral en ocasiones. Se hace eterno ir a una misión y volver. El periodo de entretenimiento es a veces menor que el de carga; inconcebible. Pese a todo, si tenemos paciencia podremos extraer muy buenos momentos de este DLC, sobre todo relativos al argumento, a la recta final y al satisfactorio avance. Las batallas son jodidamente divertidas, desafiantes y con un musicón que pone los pelos como escarpias ─una vez más el sonido no decepciona, es tremendo el elenco de temas y su intensidad─. Os tendrá más de 20 horas ahí enganchados, al menos el más largo de los que hay hasta ahora.
A veces nos pasaremos más rato pegándole a este que jugando xD |
Por cierto; si alguien echaba de menos un enemigo super poderoso que se espere al reto final tras acabar la historia. Pondrá a prueba cada disciplina, cada momento de gallardía y tirará abajo nuestro falso dominio; el equivalente a "Ente Omega" o "Arma Esmeralda" de otros FF está en este DLC, que encima debe combatirse acompañado y perfectamente coordinados si se quiere la victoria. Al tiempo de escribir este análisis el juego promete seguir aumentando misiones y corrigiéndose, por lo que es muy posible que algunos de los fallos que he comentado se mitiguen. No os perdáis este DLC, una gran oportunidad si ya teníais el Season Pass comprado y una muy buena inversión si no.
Unos consejos:
- Equipa siempre cuatro armas, aunque una de ellas no sea buena. Todas suman estadísticas a tus globales.
- Al mejorar un arma, intenta que la estadística que la hace evolucionar (representada con una barrita blanca) suba antes de llegar al máximo nivel del arma, o nunca evolucionará.
- Conviene que los líderes de cada ciudad te lleven items, los guiles y los descuentos es algo que se soluciona farmeando y haciendo misiones.
- Ante cualquier error o funcionalidad extraña que te suceda en salas de esperas, reinicia el juego sin esperar más, es tontería.
- Lleva armas elementales a combates duros, los enemigos suelen ser débiles casi siempre a un elemento.
- Cambia de arma hasta que una de ellas haga más daño al rival, siempre hay una mejor que el resto.
- No te encasilles siempre con el mismo equipo.
- Ataca por la espalda, y en su defecto, cúbrete para poder dejar a los enemigos débiles en color azul.
- Si alguien ha dejado a un enemigo en Vulnerable o en azul, ayúdale a matarlo sin dudar y usa Lux Impetus.
- Es preferible que todos ataquen a un enemigo grande que cada uno vaya por su lado ─excepto si son pequeños─.
- Recupera PM y vida en los puntos de Lux, ayudan mucho a esquivar.
- Resucita siempre a cualquier compañero en agonía, no esperes o lo pueden dejar K.O (y luego a ti).
- Coge siempre un ingrediente del campamento antes de partir; sirve para resucitarte tras 20 segundos si mueres. Al resucitar, hazte con otro ingrediente si es que lo hay.
- Cuando una misión acabe, tienes unos 10 segundos para coger un ingrediente.
- Los ingredientes de mayor nivel son mejores, pero cuidado, si todos cogen ingredientes raros como tentáculos de molbol podrían salir platos horrendos.
- Si te quedas en agonía sólo y los demás han muerto, CORRE, podrías sobrevivir (puedes salir de la agonía tú solo pasados unos segundos).
- No cubras si te has quedado sin PM.
fran_friki
No hay comentarios:
Publicar un comentario